🎨 ¡Hola, queridos artistas!
Las lágrimas corrían por el rostro de Alex, pesadas como el peso en su pecho. No sabía por qué el mundo se sentía tan ruidoso, tan abrumador. Pero incluso en medio de la tormenta interna, algo pequeño susurraba: no estás solo. A veces, llorar no es debilidad—es el comienzo de la sanación. Y quizás, solo quizás, mañana se sentirá un poco más liviano.
Apaga el teléfono y reserva este momento solo para ti. Colores, pinceles… ¡y acción! 🖼️🖌️
