¡Hola, queridos artistas!
No importa cuánto corramos—cruzando montañas, respondiendo correos o escondidos detrás de una gran taza de café—el centro de todo sigue siendo el amor. ¡Sí, el amor! Pegajoso, dulce, a veces un lío, pero siempre real. Tratamos de escondernos tras planes, tareas o incluso bocadillos, pero el amor solo saluda y dice: “¡Hola, todavía estoy aquí!”. Así que dejemos de fingir. En el corazón de la vida, el amor manda. Y, sinceramente, hace un trabajo bastante bueno.
¿Listos? Este es un momento solo para ti. ¡Disfrútalo! 🖼️🖌️
