🎨 ¡Hola, pequeños artistas!
¿Alguna vez dijiste algo gracioso sin querer o cometiste un error divertido? Eso es la vergüenza—¡y adivina qué! Todos la sentimos a veces, incluso los adultos. Puede que se te pongan las mejillas rojas o que tu barriga dé un vuelco, pero es totalmente normal. Intenta sonreír, reírte un poco y recordar: un pequeño “ups” no cambia lo increíble que eres. ¡Eres valiente, estás creciendo y no estás solo!
¡Los momentos vergonzosos hacen que la vida sea más divertida de recordar! Ponle color a la vergüenza.
¡Listos, preparados… a colorear! 🎉
